28 sept 2009

Gesto




En un arrebato exasperado,
un desamparado movimiento,
un confuso gesto perdido, casi un manotazo,
casi un manotazo de ahogado
ahogándose en su aire de pronto espeso,
recibiendo el beso de despedida dolorosamente,
como si con culpa o reparo
casi desolado,
como huérfano, como viudo,
como deudo de un presente imposible,
alejándose, borrándose a sí mismo del ahora,
convirtiéndose en improbable,
en esquivo penitente, en esclavo de antiguos opios,
fiel a sí mismo y yendo a la disolución
como a un abismo inevitable
pero sin quererla, sin hacer el tajo,
separando lo inseparable para unir lo que ya está unido,
cargando su mochila de piedras y espinas,
hundiéndose con ella o tratando de vaciarla,
mudo en el aire espeso y ahogándose
pero sin partir del todo,
dejando la estela, las señales en el camino
dejando el olor y el calor, las huellas, dejando el contacto,
dejando la presencia que no sabe irse
dejándola a ella esperando…