13 ago 2007

Tan vacío


Y perdido por perdido… caminamos así, sin destino, sin lugar al que llegar, sin hogar donde retornar. Caminamos sonámbulos, comatosos, alucinados, caminamos ilusionados y temblorosos, arropados por el engaño o desnudados por el miedo. Perdido por perdido, caminamos. Hacia el final común, hacia el punto muerto de la muerte, caminamos. Ningún nirvana nos alivia, ninguna piedad nos calma, ninguna victoria es suficiente. Caminamos, juntos o solos, abismados o iluminados, en el filo o en el medio, violentos y enojados o confundidos y calmos.

Podríamos navegar, pero para eso hace falta una nave, un puerto donde nos esperen, una carga valiosa que llevar. Así que, perdido por perdido, a la deriva y sin tesoro, caminamos. Donde nuestros pies puedan llevarnos: tan cerca, oh sí, tan cerca, tan pobremente cerca. Tan bajo, tan poco, tan vacío…